¿La flema te acompaña desde hace días? Si bien puede ser incómoda y persistente, existen estrategias caseras muy eficaces para liberarte de ella y mejorar tu respiración.
1. Hidratación inteligente: Beber agua caliente o infusiones (como té de manzanilla, limón con miel o jengibre) promueve la dilución y expulsión de la mucosidad.
2. Vapor y ambiente húmedo: El vapor abre los conductos respiratorios y reblandece la flema. Puedes inhalar los vapores de una olla caliente, usar la ducha al máximo vapor o un humidificador en tu habitación.
3. Remedios naturales expectorantes: El jengibre y la miel con limón alivian la garganta y facilitan la expulsión del moco. No solo calman, sino que también tienen propiedades antibacterianas y antiinflamatorias.
4. Alimentación que ayuda:
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Sopa de pollo caliente: ayuda a movilizar mucosidad más rápido que agua caliente sola.
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Ajo, cebolla, salmón, frutas con quercetina (manzanas, arándanos, cebolla): alimentos con componentes antiinflamatorios y mucolíticos naturales.
5. Evita lo que retiene la mucosidad: Alcohol, cafeína, lácteos y alimentos altos en histamina pueden empeorar la congestión. Crea un diario para detectar alimentos desencadenantes.
6. Prevención y estilo de vida:
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Evita irritantes como el humo, polvo, químicos y perfumes fuertes.
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Controla alergias y lava tus manos con frecuencia para reducir contaminantes respiratorios.
Cuando la flema es muy persistente (más de una semana), cambia de color (verde, amarilla intensa) o trae síntomas como fiebre o dificultad para respirar, acude a un médico para descartar infecciones o condiciones más serias.
Fuente: Medical News TodaySanitas. Salud – Tudo. Salud – TudoSingleCare.